Toda la verdad y nada más que la verdad
¿Qué le está pasando a tus senos?
Pregunta: ¿Dónde están esos senos enormes y preciosos que me prometieron?
Respuesta: En la imaginación de tu pareja, donde siempre han estado.
Para este momento probablemente ya notaste que tus senos han crecido. En Embaracilandia, por supuesto, hay una enorme disparidad en este “crecimiento”. A algunas mujeres les crecen mucho, dos o más copas, y a otras no. Pero en general el mayor aumento de tamaño se da en tu primer trimestre, con un descanso en el segundo y otro poco de crecimiento en el tercero. En promedio subirás entre 450 y 959 g de peso gracias a tus senos y solo una o dos copas de talla. (Sin embargo, pesártelos en el departamento de frutas y verduras del supermercado, aunque comprensiblemente tentador, no es recomendable. De por sí ya piensan que te robas los refrescos y las galletas).
No obstante, en Embaracilandia más grande no necesariamente significa mejor, en especial si tienes dolor. En tu estado, la definición de tus senos “mas grandes” significa mas azules, con mas bolas y mas restirados (o sea, estrías). Esto no brinda mucho consuelo a las mujeres de talla pequeña que con frecuencia están ilusionadas de pasar al lado salvaje de las mujeres exuberantes durante el embarazo, pero no obtienen los pechos enormes que ellas soñaban pero sí unos con más bolas. Sin embargo, si tienes pechos más grandes en el embarazo, no te acostumbres, después del embarazo y la lactancia, la mayoría de las mujeres regresan a su talla original.
Conforme tus pechos se van preparando para amamantar, se hacen mas grandes por el crecimiento de los vasos sanguíneos (o sea: esas hermosas líneas azules que ahora puedes ver bajo tu piel) que promueven el mayor flujo de sangre a la zona. Y después de eso, el estrógeno estimula el crecimiento de los ductos, y la progesterona estimula el crecimiento del tejido glandular (o sea: las bolas).
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